Por Rabino Nissan Ben Abraham
La Tradici?n Rab?nica
?D?nde est? escrito esto en la Tor??
Muchas veces hemos o?do esta pregunta, o la hemos expresado nosotros mismos. Nos encontramos una expresi?n, nos ense?an una ley, una costumbre, y nos preguntamos ?de d?nde ha salido esto? ?Hay alg?n vers?culo, en la Tor?, o en otro libro del Tanaj, que exprese este principio?
Hace ya tres mil trescientos veintis?is a?os subi? nuestro Maestro Mosh? (Mois?s) al Monte Sinai para recibir las dos Tablas de la Ley de manos del Creador.
Para esto no eran necesarios los cuarenta d?as y cuarenta noches que pas? Mosh? en la cima del Monte: una hora para subir, otra hora para bajar, un ratito para estar con el Creador y recibir las Tablas? ?Para qu? necesita cuarenta d?as y cuarenta noches?
Mosh? estuvo estudiando de boca del Creador todos los mandamientos y las buenas acciones imprescindibles para fundar este pueblo tan especial que es Israel. Para esto fueron necesarios los cuarenta d?as con sus respectivas noches, sin comer, ni dormir, ni hacer nada m?s que estudiar.
La parte principal de estas ense?anzas fueron puestas por escrito durante los cuarenta a?os de viaje por el desierto, y es lo que llamamos la Tor?, la Ense?anza. Pero al mismo tiempo otras muchas ense?anzas, que hab?a recibido del Creador, fueron transmitidas por v?a oral, y es la llamada Tor? Oral, paralela a la Tor? Escrita. M?s adelante aparecen las Profec?as y los Escritos Santos, que completan el Tanaj (la Biblia). En total son 24 libros[1], aunque los cristianos dividieron algunos de ellos en dos partes.
La Tor? Oral
La Tor? Oral fue transmitida de maestros a alumnos durante muchos siglos, hasta que con la destrucci?n del Templo de Jerusal?n a manos de los romanos, hace unos dos mil a?os, y la grave dispersi?n de los jud?os lejos de su patria ancestral, los maestros se vieron en la necesidad de comenzar a ponerla por escrito. Pero no lo hicieron todo de una vez. Primero escribieron las bases de las leyes de conducta en un c?digo llamado ?Mishn??. Luego lo ampliaron con explicaciones, controversias, ejemplos y an?cdotas en un enorme compendio llamado ?Talmud?.
La mayor?a de las ense?anzas no eran nuevas, sino que hab?an sido trasmitidas desde cientos de a?os antes. Pero sin duda hubo un proceso evolutivo dentro de estas ense?anzas, como explica el mismo Talmud, cuando los Sabios deduc?an una nueva ley al comprender un principio abstracto y luego aplic?ndolo adecuadamente a las nuevas necesidades o las nuevas situaciones. Y, finalmente, puede haber casos extraordinarios, debidos a la decadencia acarreada por la dur?sima Di?spora a lo largo de los casi veinte ?ltimos siglos, en que los Sabios se vieron obligados a publicar decretos completamente nuevos para facilitar el retorno a la situaci?n original.
Paralelamente a la aparici?n del Talmud, se pusieron por escrito otro tipo de ense?anzas: el Midrash. En realidad se trata de la ex?gesis de los vers?culos de la Tor?, con ense?anzas legales o morales, hist?ricas o sociales. Y divinas. Al decir ?divinas? me refiero a las ense?anzas que nos permiten ponernos en contacto con el Creador. Las leyes, la ?tica, nos permiten comportarnos correctamente, a nivel personal, familiar o social y nacional. Pero a?n no bastan para ponernos en contacto con el Creador: para ello est?n las ense?anzas ?divinas?.
Puesto en orden
Todas estas ense?anzas est?n en un total desorden, hasta el punto que algunas veces resulta dif?cil de clasificar correctamente las ense?anzas.
Pero los Sabios, los rabinos, dedican horas y horas al estudio de la Tor?, de la Mishn?, del Talmud y del Midrash para sacar todo el jugo a estas ense?anzas, clasificarlas correctamente, comparar unas con otras y resolver las aparentes contradicciones. As? apareci?, hace casi ochocientos a?os, el primer gran resumen de todas las leyes jud?as, las ?halajot?, compuesto por el rabino espa?ol Mosh? ben Maim?n, Maim?nides, que recoge todas las ense?anzas que emanan de la Tor? y del Talmud en su gran obra ?Mishn? Tor??.
Desde entonces han ido apareciendo m?s comentarios, m?s innovaciones, todas ellas respaldadas por las fuentes acreditadas. El hecho de que hayan aparecido significa que el sistema est? vivo, no es un c?digo pasado de moda, anticuado, sino que sabe adaptarse al cambio de costumbres y de perspectivas, guardando siempre una seriec?sima y respetuosa fidelidad a los cientos de principios aprendidos en las Sagradas fuentes.
Los sabios, los rabinos, siguen dedicando largu?simas horas al estudio de la Tor?, Oral o Escrita. Pero no tan solo ellos, sino que cualquier jud?o puede y debe estudiar la Ley, la Ense?anza divina, para poder as? acercarse m?s al Creador al cumplir su voluntad en cada acto que lleve a cabo, en cada paso que d?.
Por lo tanto, cada vez que nos hacen esta pregunta: ??D?nde est? escrito esto en la Tor??? trat?ndose de un texto, una ense?anza, una ley que efectivamente no est? en la Tor? Escrita, podremos contestar que ?est? en la Tor? Oral? o que ?nuestros Sabios la dedujeron del contexto?, o que ?decidieron a?adir este decreto, por una necesidad del Pueblo?.
[1] Los cinco libros del Pentateuco: G?nesis, ?xodo, Lev?tico, N?meros y Deuteronomio. Ocho libros de Profetas: Josu?, Jueces, Samuel (1 y 2), Reyes (1 y 2), Isa?as, Jerem?as, Ezequiel y ?Los Doce?. Once de los Escritos Santos: Salmos, Proverbios, Job, Cantar de los Cantares, Rut, Lamentaciones, Eclesiast?s, Ester, Daniel, Esdras-Nehem?as y Cr?nicas (1 y 2). ?Los Doce? son doce libros cortos de profetas, reunidos y que cuentan como un solo volumen; se trata de Oseas, Joel, Am?s, Abd?as, Jon?s, Miqueas, Nah?m, Habacuc, Sofon?as, Ageo, Zacar?as y Malaqu?as.