La prohibici?n del Pat-Acum
Hacia finales del Segundo Templo, hace unos dos mil a?os atr?s, se establecieron en el juda?smo una serie de leyes destinadas a alejar los jud?os de los no-jud?os en varios temas que pod?an causar intimidaci?n.
Era una ?poca en que las relaciones con gente de otra nacionalidad significaba convertirse en un id?latra. El Talmud (en el tratado de Shabat 17b) explica que se reunieron los grandes Sabios de Israel en un solo lugar y decretaron una serie de leyes, dieciocho en total, entre las que hab?a cuatro destinadas a marcar esta separaci?n. Y la que nos interesa ahora: la prohibici?n del pan.
El decreto dice que un jud?o no puede comer un pan preparado para un no-jud?o, denominado ‘pat-acum’ (= pan de los id?latras).
Hay diferentes opiniones sobre el decreto en s?. Unos opinan que la prohibici?n era s?lo del pan preparado en las casas de los no-jud?os, y no al preparado en la panader?a, ya que la intenci?n del decreto era evitar la intimidad entre jud?os y no-jud?os. Otros opinan que el decreto era general pero, m?s tarde, se dieron cuenta de que la gente no pod?a cumplir con el decreto y permitieron el pan de horno. Y, por ?ltimo, otros que dicen que el decreto del pan, como otro de ellos, no fue aceptado por todos y se vieron en la necesidad de limitar, sin embargo, el pan casero.
Intervenci?n Jud?a
Esto significa que all? donde se puede encontrar pan preparado por jud?os, estar? prohibido comer pat-acum, y s?lo donde no hay otra manera de encontrar pan, estar? permitido comer del horno, pero no del casero. En Israel, por ejemplo, o en lugares donde viven muchos jud?os y se puede encontrar pan jud?o con facilidad, no hay ninguna excusa para comer pat-acum. En lugares donde son pocos los jud?os observantes, en cambio, o cuando la diferencia de precio significa que la gente tendr? que pagar mucho para poder conseguir pan jud?o, se puede permitir el pat-acum.
Asimismo, el Talmud explica que f?cilmente se puede solucionar el problema, ya que basta que un jud?o participe un poco en la preparaci?n del pan para que se considere pan jud?o. Por ejemplo, seg?n una de las opiniones, basta que el jud?o encienda el fuego o, segundo otra mucho m?s liberal, a?ada un poco de le?a para atizarlo. Cuando los hornos de pan ten?an las puertas abiertas al p?blico, que pod?a llegar hasta la boca del horno, hab?a un jud?o de la comunidad encargado de a?adir un poco de le?a al horno para que todo el pan preparado en aquella tanda fuera permitido.
Todo esto suponiendo que todos los ingredientes del pan sean permitidos. Hay unos pocos problemas.
Posibles problemas
En primer lugar, la harina debe ser ‘vieja’. La Tor? dice que la producci?n de trigo ‘nuevo’ est? prohibida hasta que pase el segundo d?a de la Festividad de Pesaj. Normalmente, el trigo (y tambi?n los otros cereales que tienen gluten) se siembra y crece antes de Pesaj y se recoge pocas semanas despu?s de la fiesta, y no hay ning?n problema con este trigo. Pero, con la globalizaci?n, hemos llegado a un punto en que, cuando falta harina en un lugar, puede llegar del otro extremo del mundo, y si este trigo ha sido sembrado tras Pesaj y todav?a no ha llegado el siguiente Pesaj, tanto el trigo como la harina estar?n prohibidos. Esto est? bien regulado en Israel, donde se vigila la importaci?n de trigo.
El segundo problema es que en Mallorca todav?a hay hornos que ponen manteca a las palas o las latas utilizadas para hornear el pan. Si bien es verdad que el gusto que puedan dar al pan no es importante, sin embargo es feo comerlo as? y, por tanto, tendremos que buscar hornos donde no hagan uso de manteca o, al menos, tengan latas separadas para el pan donde no ponen manteca. La mayor?a de los hornos ‘modernos’ ya no hacen uso de manteca para preparar el pan y este problema queda eliminado.
Las mujeres jud?as tienen mucho cuidado en tamizar la harina antes de preparar la pasta, ya que se pueden criar gusanos dentro de la harina, y se hace uso de un tamiz muy apretado para evitarlos. Esto es a priori, y todos los que quieran preparar pan o cualquier producto con harina tendr?n que tamizar correctamente, pero se supone que la mayor?a de los hornos emplean harina de buena calidad y aunque haya alg?n gusano, habr? desaparecido en el proceso de la panificaci?n.
Actualmente puede ser a?adidos estabilizadores en el proceso de preparaci?n del pan, y puede que algunos de ellos vendan un producto que no est? permitido por la ley jud?a. Hay listas de estos productos, marcando los que est?n permitidos y los que no, y se pueden consultar f?cilmente. En algunos casos, el hecho de que contenga estos elementos no significa precisamente que el producto est? prohibido, y es necesaria una decisi?n rab?nica en cada caso.