Por Rabino Nissan Ben Avraham
El Enviado

Una figura controvertida es la de un criptojud?o nacido en Portugal sobre el a?o 1500, solo tres a?os despu?s de la forzosa conversi?n de los jud?os por orden del Rey Manuel.
El joven, bautizado con el nombre de Diogo Pires, recibi? una exquisita educaci?n que le permiti? ocupar el puesto de secretario en uno de los juzgados de Lisboa ya a la temprana edad de los veinte y pocos a?os. Fue cuando conoci? a un jud?o negro y bajito, vestido con unas ropas extravagantes y hablando en ?rabe, posiblemente yemenita, que hab?a llegado como enviado de su hermano el rey Yosef a visitar al rey de Portugal. Se hac?a llamar David haReuven?, y dec?a ser descendiente de una de las Diez Tribus Perdidas de Israel.
Este reci?n llegado caus? gran revuelo entre los conversos de Portugal que llegaron a organizar el rescate de una mujer de las garras de la Inquisici?n, enviando a un criptojud?o portugu?s disfrazado de fraile a Badajoz donde la ten?an encerrada. Caus?, tambi?n, que el joven Diogo decidiera dar un nuevo rumbo a su vida. La visita de David haReuven? encendi? su imaginaci?n y comenz? a ver extra?os sue?os. En su primer sue?o, vio que deb?a circuncidarse, para cumplir con el mandamiento divino al patriarca Abraham y para pertenecer plenamente al pueblo de Israel. Con sus propias manos se circuncid? y cambi? su nombre por el de Shlom? Moljo (Molco o Molho).
En otro sue?o que tuvo vio tres tipos de palomas: unas blancas, otras grises y otras negras, representando a los jud?os hispano portugueses, unos que se hab?an mantenido fieles a su fe ancestral, otros que se hab?an dejado bautizar y finalmente aquellos que se hab?an convertido en fieles cristianos. Pero sus enemigos mataban tanto a unas como a otras e incluso las primeras perd?an la blancura de sus plumas. Hasta que aparec?a una figura divina vestida de blanco que her?a a los enemigos y devolv?a el color blanco a las palomas, y as? despertaban los criptojud?os y regresaban a su fe ancestral.
R?pido estudio
No le gust? todo esto al rey de Portugal y por ello tuvo que escapar r?pidamente del pa?s. Mientras segu?a a David haReuven? su busca de aliados en Europa para luchar contra los Otomanos, que estaban a las puestas de Hungr?a, Shlom? se fue al Imperio Otomano donde conoci? a rab? Yosef Caro, seguramente en la ?poca en que viv?a en Adrian?polis o en Sal?nica. ?ste qued? muy impresionado de la personalidad de rab? Shlom? y del rapid?simo proceso de estudio. En Sal?nica conoci? a rab? Shlom? Alcabe?, el autor del poema ?Lej? Dod??, y a rab? Yosef Taytazac, que era el presidente de la academia talm?dica de la ciudad. Ambos apreciaban much?simo al joven Shlom? Moljo a quien ya de denominaban ?rabino?, ya que ten?a una predisposici?n natural al estudio, sobre todo de la Ciencia Oculta del Juda?smo, que le convirti? en poco tiempo en un gran experto en sus escritos.
Moljo ve?a en el estudio de las Ciencias Ocultas del Juda?smo el mejor modo de devolver al Pueblo de Israel, especialmente a sus hermanos criptojud?os, su independencia y llevarlos a la esperada salvaci?n, y se dedic? a ello con todas sus fuerzas. Para ello, so?aba con levantar un ej?rcito jud?o que luchara contra los otomanos. Esto ha llevado a algunos cr?ticos modernos a considerarlo como un mesianista o incluso un falso mes?as, pero todos los grandes rabinos de su ?poca y de ?pocas posteriores lo ven como una gran figura ejemplar.
De todos modos, parece que Shlom? Moljo visit? la ciudad de Tsfat (Safed), al noroeste del lago de Kin?ret, en Galilea, y parece que all? se cas?.
Visita al Vaticano
Mientras tanto, el ej?rcito del Sacro Imperio Romano Germ?nico libraba su segunda guerra contra el rey de Francia, Francisco I, y la Liga de Co?ac, a la que pertenec?a el Papado. En el a?o 1527 invad?an las tropas de Espa?a y el Sacro Imperio, bajo las ?rdenes de Carlos III de Borb?n, la ciudad de Roma y el Papa Clemente 7? escapaba vergonzosamente por el ?passetto? desde el Vaticano hasta el Castillo de Sant?Angelo, donde qued? encerrado durante siete meses, dejando atr?s casi cuatro quintas partes de su Guardia Suiza masacrada a manos de los invasores.
Moljo vio en ello una se?al divina, y decidi? llegar a Italia para predicar en los barrios jud?os, que quedaban maravillados por sus palabras. Pero tambi?n se maravillaban algunos sacerdotes que ven?an a escuchar sus palabras.
El problema era que entre los jud?os que le escuchaban hab?a tambi?n quien temiera mucho la ?misericordiosa? reacci?n de la Iglesia, como hab?an ya presenciado en la pen?nsula ib?rica, y ve?an en Moljo un grave peligro para todos los jud?os. En Ancona le delataron al obispo, quien le llam? para una entrevista, ya que a ojos de la Iglesia era un hereje cristiano que hab?a apostatado del Cristianismo. Shlom? Moljo se present? ante ?l y declar? con valent?a que era verdad, ya que solo la Tor? era divina y ?l deb?a seguir sus preceptos. El obispo qued? mudo y al final de la entrevista le dej? partir.
Sigui? su camino hacia Roma, entrando como pordiosero y exclamando ??Oh, Se?or! ?Hasta cu?ndo t? no tendr?s misericordia de Jerusal?n y de las ciudades de Jud??? (Zacar?as 1:12). Y tuvo un sue?o en el que ve?a la destrucci?n de Roma por un ?diluvio? y un terremoto en su pa?s natal, Portugal. Pero tuvo que huir tambi?n de Roma y fue al encuentro del Papa barbudo, que se dejaba crecer la barba desde que el ?Sacco? de Roma le hubiera puesto en el exilio. Rab? Shlom? le comunic? el sue?o referente a la pr?xima destrucci?n de Roma y pidi? enviar un mensaje al rey de Portugal para advertirle del cercano terremoto. El Papa le dio un salvoconducto que le salvar?a de manos de sus enemigos en la Iglesia.
Cumplimiento de sus visiones
Lleg? a Venecia donde public? sus ?Drashot? (pr?dicas) y las envi? a Sal?nica.
En el d?a 8 de octubre de 1530 se cumpl?a la profec?a de rab? Shlom? Moljo cuando el T?ber se desbordaba ahogando a miles de personas y destruyendo sus hogares. Menos de cuatro meses m?s tarde se cumpl?a la segunda parte del sue?o cuando un fuerte terremoto asol? la ciudad de Lisboa el 26 de enero de 1531. De este modo se present? de nuevo ante el Papa con la petici?n de no permitir la instauraci?n de la Inquisici?n en Portugal, que Clemente 7? acept?.
Por desgracia fueron los mismos jud?os los que buscaban la perdici?n de Moljo e influyeron en el Papa hasta que se vio obligado a anular el salvoconducto. Rab? Shlom? huy? de Roma y el rey Juan de Portugal junto con el rey Carlos de Espa?a obligaron al Papa a permitir la creaci?n de la Inquisici?n en Portugal.
La Hoguera
En Venecia, varios meses m?s tarde, reencontr? a David haReuven? y juntos se encaminaron a la corte del Emperador del Sacro Imperio Romano Germ?nico, con la esperanza de convencerlo a salir con su ej?rcito y con un ej?rcito jud?o a luchar contra los otomanos: Rab? Shlom? enarbolaba una bandera con el acr?stico ?Macab?? (Mi Camoja Baelim A?donay = Qui?n como t? entre los dioses, Se?or). Lo encontraron en Ratisbona, donde se hab?an reunido los dirigentes de sus facciones, y el emperador les concedi? una entrevista.
Pero al cabo de ella envi? a rab? Shlom? a Mantua, en Lombard?a, donde fue juzgado por la Inquisici?n y condenado a muerte en la hoguera. Por miedo a que diera una pr?dica, o a que usara sus ?poderes m?gicos?, le amordazaron hasta que estuvo sobre la hoguera. Dicen que el emperador le conced?a un salvoconducto si se retra?a del juda?smo. Al quitarle la mordaza, dijo rab? Shlom?: ?por haberme comportado seg?n aquella religi?n (cristiana) mi coraz?n me duele y est? enfermo. Y ahora, haced conmigo lo que os plazca?. Mor?a a los 32 a?os.
La figura de rab? Shlom? Moljo queda entre nosotros como un gran jud?o que estaba dispuesto a ponerse en peligro por su fe jud?a y por la salvaci?n del pueblo de Israel. Es reconocido por los grandes rabinos de su ?poca como gran conocedor de los libros santos y por una vida ejemplar. Rab? Yosef Caro lo admiraba y anhelaba morir como ?l, y el Magu?n Avraham (un comentarista del Shulj?n Aruj) aporta su testimonio para la halaj?.
Rab? Shlom? Moljo es como una bandera que re?ne a los dispersos de Jud? y a los criptojud?os y los llama a regresar al cumplimiento de la Tor? y a regresar a su patria ancestral. Ten?a varias banderas de seda con vers?culos de los salmos bordados en ellas. Unas de sus banderas estaban en la sinagoga de Altneuschul en Praga y ahora han pasado al museo jud?o de Praga.
Gracias por el articulo historico de Shlomo MOLCHO.